viernes, 10 de octubre de 2014

Sobre la conciencia

Hablamos de conciencia refiriéndonos a esa facultad humana de autorreflexión que nos dicta, antes de ejecutar un hecho, un comportamiento. Por norma hablamos de buena conciencia, aunque justo es reconocer que también existe la mala, lo mismo que existen el bien y el mal. Ambas se debaten en nuestro fuero interno y contribuyen a las buenas y malas acciones a las que nuestra capacidad e intereses nos conducen. Obviando la mala y quedándonos con el desarrollo de la conciencia, buena por antonomasia, vertamos un decálogo de sugerencias para contribuir a ser mejores personas, a ser más felices convenciéndonos de que son válidas y mejores ciudadanos con vistas a hacer la vida más agradable, porque a veces cargamos sobre nuestros hombros cargos de conciencia por temas que no deberían afectarnos tanto. 01. Trata de llegar al corazón de los problemas 02. Toma parte activa en lo que es verdaderamente importante en tu vida 03. Procura que las acciones y emociones de otras personas te influyan cada vez menos 04. Abandona actividades y tareas innecesarias y superfluas que no te enriquezcan 05. Conviértete en una mejor persona que crece en múltiples aspectos personales 06. Compréndete mejor a ti mismo revisando tus patrones de pensamiento, acciones y actitud 07. Desarrolla y practica la productividad máxima alejándote de la adicción a las distracciones 08. Inspira a otros a acompañarte en tu camino de desarrollo personal 09. Alivia tu estrés incrementando las actividades y hábitos positivos 10. Deja de lado a aquellas personas o ideas que están en contra de tus más grandes sueños.